El conspicuo y novedoso currículo básico de la ESO y Bachillerato de la LOMCE

A propuesta del conspicuo Wert, el Consejo de Ministros ha aprobado el decreto que regula el nuevo currículo de la ESO y Bachillerato.

¿Novedades? Según el conspicuo ministerio, “se proponen nuevos enfoques en el aprendizaje y en su evaluación, no relacionados con la cantidad de lo memorizado sino con lo que el alumno asimila y es capaz de hacer”.

Totalmente de acuerdo. ¿El problema? A ver cómo casa tan encomiable propuesta con las pruebas de la reválida suscitada y resucitada que también se propone para cuando el alumnado finalice cada ciclo.

Si se trata de unas pruebas como las de la vieja reválida, no casaría en absoluto. Las nuevas pruebas evaluativas deberían, pues, en buena lógica, estar encaminadas a evaluar competencias básicas y no memorísticas, o cuando menos, no meramente memorísticas.

Hasta el momento, credo quia absurdum

Como la película, Retorno al pasado (la de Jacques Tourneur de 1947 con Robert Mitchum y femme fatale), y encima, los más chulos, queriendo quedar de modernos y novedosos. Perdonen la intromisión de la película tras un revisionado reciente.

El ministro Wert y la secretaria de Estado de Educación, Montserrat Gomendio
El ministro Wert y la secretaria de Estado de Educación, Montserrat Gomendio

Y como siempre, elaboraciones sin colaboraciones, sin tener en cuenta al profesorado. ¿Qué van a saber los profesores de estos asuntos? Ya les vale con el sueldo fijo que cobran, qué más quieren. Ya lo dijo la conspicua secretaria de Estado de Educación, doña Montserrat Gomendio Kindelan, y novia del a su vez conspicuo Wert: “los profesores hacen huelga porque tienen un sueldo asegurado”.

La misma que dijo: «La inversión educativa se fue en mejorar el sueldo de los profesores«, a la par que “se ha invertido mucho pero no bien”, con el consiguiente spinoziano corolario de que, por tanto, piensa la señora que mejorar el sueldo a los trabajadores es invertir mal.

Y… ¿a qué mejora de sueldo se referirá? Umm, yo pensaba que los profesores tenían su soldada congelada y que incluso les habían quitado pagas extras.

Me pregunto: ¿sabe la señora Gomendio cuánto se ha invertido en el sueldo de los secretarios de Estado durante estos años? Ella, que es secretaria de Estado de Educación, seguro que lo sabe. ¿Qué opinará esta señora de enseñar practicando con el ejemplo?

Pero yo estoy con esta señora cuando dice que la LOMCE «busca modernizar el sistema educativo, que deje de ser puramente memorístico». Claro que sí.

De todos modos vuelvo a sus inquietudes, habrase visto, protestar estos profesores con un sueldo asegurado con la de parados que hay. ¿Dónde vamos a llegar?

Pues eso, que ni se ha negociado ni evaluado el impacto directo de los cambios en las condiciones laborales del profesorado.

¿Antecedentes de la implantación? El caos que se produjo ya con la implantación de los currículos de Primaria (donde se ha implantado, claro está). Por lo pronto, es manifiesta la falta de tiempo material para el desarrollo de los currículos autonómicos.

Obvio que uno no ha tenido aún tiempo para leer las 378 páginas del BOE que regulan los nuevos currículos, aunque la mayor parte de ellas se van en desarrollar anexados los bloques de las distintas materias divididos en: contenidos, criterios de evaluación y estándares de aprendizaje evaluables.

No obstante, nos felicitamos de la aparición de esta columna de «estándares de aprendizaje evaluables» donde se concretan lo que en nuestro centro llamábamos «indicadores de evaluación» a partir de lo que aprendimos de nuestra participación en PICBA.

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Por su parte, doña Susana Díaz, la conspicua presidenta de Andalucía, nos consolaba hace pocos meses: «Intentaremos aliviar el impacto de la LOMCE en Andalucía». Así tal cual. Como si un meteorito se acercará al planeta y fuera nuestra salvadora.

Doña Susana Díaz, personalmente, yo ya me he quedé impactado suficientemente cuando usted y el gobierno que preside, compartido con la conspicua Izquierda Unida, ha dejado de pagarnos los complementos autonómicos de la paga extra a los profesores andaluces mientras que en el resto de comunidades de España se les pagaba.

Ya ve usted, la Gomendio que no quiere que los alumnos aprendan sólo de forma memorística, y uno, quien escribe, que se empeña en mantener la memoria de lo mal que nos paga.

Empiezo a sospechar por qué no quieren que tengamos una buena y conspicua memoria…

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